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Vamos de lo ordinario a lo extraordinario

Un paso extra EN LO QUE HACES, te hace extraordinario/A

Una persona extraordinaria es quien trabaja para llenarse de valor agregado por dentro y lo exterioriza al mundo para bien, sin guardarse con egoísmos. Una persona extraordinaria hace su trabajo con un paso más adelante que el resto, no se conforma con hacer algo puntual, sino que va más allá, comparte y enseña al resto cómo mejorar las cosas.

 

El hacer ése "extra" de más en tus actividades, te convierte en un ser humano de valor agregado, pues dejas a un lado el conformismo. 

  

Como ves, ser extraordinario va más allá del dinero, status social, o cualquier otra superficialidad. Mas bien, cuando eres extraordinario, obtienes los tesoros más importantes, los tesoros que tienen un valor tan inmenso que el dinero no puede comprar: los tesoros de tu corazón, tu fuerza interior, tu proactividad, tu esencia activa, tus ganas de marcar la diferencia en tus acciones, tu plena confianza en Dios.

 

Ser extraordinario es llevar a cabo tu vida con énfasis, llenarte de logros superando retos, puedes ser extraordinario desde las pequeñas cosas a las que les das "tu toque personal", hasta convertirte en una persona emprendedora. Cuando dejas a un lado una forma de pensar estándar y te enfocas en acciones superiores, puedes lograr grandes beneficios en tu vida y en la de tus seres queridos. Cuando actúas en un nivel superior al común denominador, tendrás incluso nuevas perspectivas de visión. Que el pasado o el miedo no te aten a ser mejor cada día. Debes ser extraordinario en tus relaciones familiares, en tu trabajo, en cuidar tu salud, en tus relaciones sentimentales, en todo lo que vivas, sé extraordinario.

 

Cuando eres extraordinario, amas lo que haces, compartes lo que recibes, eres generoso, ves cosas reales en donde otros ven nada, eres tú mismo/a, eres diferente pues no intentas ser copia del resto al actuar con personalidad propia, tienes sencillez pues no te jactas con egocentrismo de tus logros, pones al servicio de los demás lo que sabes, amas a plenitud sin reservas, encuentras tus respuestas en el silencio. 

 

Eres extraordinario cuando te atreves a tomar riesgos usando tu mente, cuando te levantas de la adversidad, cuando tienes disciplina, cuando dejas de quejarte y te llenas de valor para levantarte, cuando te predispones a aprender cada día, cuando le encuentras sentido a tu vida. Eres extraordinario, cuando te comprometes a mejorar tu crecimiento personal, lo cual incluye un crecimiento espiritual.

 

Cada momento aprendido es vital, incluso aquellos momentos que nos han lastimado, decepcionado o frustrado tiempo atrás.

 

Levantémonos con gozo y confianza en Dios para ver las cosas desde una perspectiva más alta: "El Señor te podrá al frente, no detrás. Siempre estarás arriba, nunca abajo, con tal que obedezcas los mandamientos del Señor, tu Dios, que hoy te ordenó practicar cuidadosamente". Deuteronomio 28, 13.

 

Cuando pones algo “ordinario” en las manos de Dios, Él lo convertirá en algo “extraordinario”: "Encomienda tus obras al Señor, y se realizarán tus proyectos". Proverbios 16, 3.

 

Recuerda: Busca darle valor agregado a tu vida comenzando por los pequeños detalles adicionales, cada detalle extra puede marcar la diferencia en tus resultados. No es cuestión de que te conviertas en un súper héroe, es simplemente mejorar día a día, hacer las cosas bien y cada vez mucho mejor, así de simple.

 

Con afecto,

Javier

 

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